EL ESPÍRITU DE AMALEC

     Como hemos mencionado en otras entradas, tras la desaparición de los apóstoles y la dispersión de los judíos por el imperio romano, se generalizó la interpretación alegórica de las Escrituras hebreas, o Antiguo Testamento. Es decir, que las historias que allí figuran sirven como ejemplo y enseñanza para los creyentes, olvidando un tanto el hecho de que el Israel físico siempre será el pueblo elegido y que hay profecías y promesas que le incumben sólo a él.

   Estas interpretaciones alegóricas no son en sí mismas malas, al contrario, pues está escrito que toda la Escritura es inspirada por Dios y útil para instruir, para enseñarnos y servirnos de modelo a seguir, sin embargo, uno de los propósitos de este blog, es el de restaurar la interpretación literal de dichos textos. En el presente artículo vamos a ver estas dos interpretaciones, y cómo se complementan entre sí.

     Así por ejemplo, cuando leemos que el Eterno ordenó a su pueblo destruir o expulsar totalmente a algunas naciones -al entrar a la tierra que tenía designada para ellos-,por su propio bien, como dice en Números 33:55 "Pero si no expulsáis de delante de vosotros a los habitantes de la tierra, entonces sucederá que los que de ellos dejéis serán como aguijones en vuestros ojos y como espinas en vuestros costados, y os hostigarán en la tierra en que habitéis.", la interpretación alegórica nos enseña que estos pueblos son símbolos del pecado en nuestras vidas, que tenemos que combatir y expulsar de nosotros, para que no se conviertan en "aguijones" para nuestra alma. Una buena aplicación, sin duda.

     Siguiendo con esta interpretación, de las naciones que combatieron a Israel tras su peregrinación por el desierto, hubo una que recibió una atención especial en las Escrituras. Se trata de los Amalecitas, los descendientes de Amalec. De ellos dice Deuteronomio 25:17-19 " Acuérdate de lo que te hizo Amalec en el camino cuando saliste de Egipto, cómo te salió al encuentro en el camino, y atacó entre los tuyos a todos los agotados en tu retaguardia cuando tú estabas fatigado y cansado; y él no temió a Dios. Por tanto, sucederá que cuando el SEÑOR tu Dios te haya dado descanso de todos tus enemigos alrededor, en la tierra que el SEÑOR tu Dios te da en heredad para poseerla, borrarás de debajo del cielo la memoria de Amalec; no lo olvides". 

      Amalec fue nieto de Esaú, el hermano de Jacob, y parece que sus descendientes engendraron el rencor que tuvo su abuelo contra Jacob, cuando éste le quitó la primogenitura. Los amalecitas atacaron por la retaguardia, sin provocación previa por parte de Israel, de forma inmisericorde sobre los que estaban cansados y agotados.

     El capítulo 17 de Éxodo nos cuenta más sobre la batalla, que tuvo lugar unos mil quinientos años antes de Cristo. En este texto vemos cómo Moisés subió a la cumbre de un collado y desde allí intercedía por su pueblo, de manera que cuando el profeta tenía la mano extendida, Israel prevalecía y cuando la dejaba caer era Amalec quien dominaba.

     Entonces pasó lo que nos cuentan los versículos 12 al 16:

"...Pero las manos de Moisés se le cansaban. Entonces tomaron una piedra y la pusieron debajo de él, y se sentó en ella; y Aarón y Hur le sostenían las manos, uno de un lado y otro del otro. Así estuvieron sus manos firmes hasta que se puso el sol.
 
    Y Josué deshizo a Amalec y a su pueblo a filo de espada.

    Entonces dijo el SEÑOR a Moisés: Escribe esto en un libro para que sirva de memorial, y haz saber a Josué que yo borraré por completo la memoria de Amalec de debajo del cielo.

      Y edificó Moisés un altar, y le puso por nombre El SEÑOR es mi Estandarte, y dijo: El SEÑOR lo ha jurado; el SEÑOR hará guerra contra Amalec de GENERACIÓN EN GENERACIÓN."

     De estos textos podemos sacar importantes aplicaciones para nuestra vida:

-Al igual que Amalec atacó sobre los rezagados y cansados de Israel, el enemigo busca atacarnos en nuestros puntos débiles. Todos sabemos "de que pie cojeamos", por lo tanto debemos mantenernos en guardia. Cuando dejamos de levantar nuestras manos a Dios, el pecado prevalece y, por el contrario, cuando clamamos a Él, este es derrotado.

-De la misma forma que Moisés extendía sus manos intercediendo por su pueblo. Mil quinientos años después, Otro extendió sus manos, para interceder no sólo por su pueblo sino por todo aquel que clamara a El. Se trata del Mesías, Yeshúa, quien extendió sus manos en la cruz para interceder por todo pecador que se arrepiente y reconoce que El es el Hijo de Dios, el único camino al Padre. Y con su muerte venció al pecado al igual que Josué venció a los amalecitas (la raíz del nombre Josué es la misma que la de Yeshúa). Es muy interesante observar los paralelismos entre la vida de Moisés y la de Jesús; ambos escaparon siendo niños de una muerte segura, ambos fueron mansos, ayunaron durante cuarenta días, realizaron señales portentosas, e intercedieron por su pueblo.

     Impresionante la enseñanza espiritual que sacamos de estos textos, sin embargo, hay algo más y ya no tiene que ver con una interpretación alegórica, sino con una profecía literal que llega hasta nuestros días.

     Dice el Señor que haría guerra contra Amalec de generación en generación, y que borraría por completo su memoria debajo del cielo.
     
     Y efectivamente ha sido así, vemos como Amalec ha estado en guerra continuamente con Israel. En 1ª de Samuel cap 15, cuatrocientos años después de este primer enfrentamiento, podemos leer como el profeta transmitió al flamante rey Saúl, la orden del Creador de destruir completamente a los amalecitas y sus posesiones, sin dejar ningún superviviente. Sin embargo, Saúl perdonó la vida al rey amalecita y se quedó con lo mejor de su ganado. Esta desobediencia le costó el reino, que fue traspasado a David. 

     Y es que Dios siempre tiene un propósito cuando dice u ordena algo, aunque a nosotros nos cueste entenderlo o nos pueda parecer drástico. Él castigó con fuego y azufre a Sodoma y Gomorra debido a la inmoralidad que practicaban y en el caso de Amalec yo pienso que pudo ordenar su destrucción porque para el Señor no existe el pasado, presente y futuro, conoce todo lo que va a ocurrir, y los descendientes de Amalec han sido un verdadero aguijón para Israel a lo largo de los siglos.

     Poco después de este suceso, los amalecitas atacaron las familias de David y sus hombres cuando estos salieron en campaña. Secuestraron sus mujeres, hijos y bienes. Sus subordinados estuvieron a punto de apedrear a David, culpándolo por lo sucedido, mas éste se fortaleció en su Dios y el Creador le dio una  gran victoria sobre ellos, rescatando a todos los suyos.

     Quinientos años después, en el siglo V antes de Cristo, tal y como nos cuenta el libro de Ester, con Judá exiliada y esparcida por todo el imperio persa, un descendiente de los amalecitas "Amán" fue el ideólogo de uno de los más terribles planes de exterminio, de genocidio, del pueblo judío, que fue desbaratado por el Señor, a través de la intervención de Ester y Mardoqueo.(Recomiendo que se lea la entrada http://restaurad.blogspot.com.es/2013/01/purim-fest-1946.html).

    Tras el paso de los sucesivos imperios se perdió el rastro a los descendientes de los amalecitas, pero pienso que  la historia nos demuestra -y ahora volvemos a entrar en el terreno de la interpretación- que el espíritu de Amalec ha seguido a lo largo de los siglos, combatiendo al pueblo elegido. Conforme a lo que podemos leer en Amós 1:11 "Así dice el Señor: Por tres transgresiones de Edom (Edom es Esaú, el abuelo de Amalec), y por cuatro no revocaré su castigo, porque con espada persiguió a su hermano, y suprimió su compasión; su ira continuó despedazando y mantuvo su furor para siempre."

     A lo largo de los siglos este espíritu de Amalec ha intentado la aniquilación del pueblo judío, con una crueldad terrible sin mostrar compasión, atacando a los más débiles, como la primera vez allá en el desierto. Griegos, romanos, rusos o alemanes han intentado en distintas épocas, destruir a los hebreos.

     E incluso, los sabios judíos, han visto en la nada santa inquisición o en las cruzadas, este mismo espíritu criminal y asesino, esto ha provocado los terribles prejuicios que tienen hoy en día hacia todo lo que tenga el nombre de "cristiano", y que también los judíos mesiánicos sufran persecución en Israel, aunque continúan obedeciendo las costumbres de su pueblo. He comprobado lo difícil que es explicarle a un judío, que el verdadero cristiano ama y bendice a Israel, que al mismo tiempo que la iglesia de Roma perseguía y mataba a los judíos, hacía lo mismo contra los verdaderos seguidores de Yeshúa.

    Hoy en día es el presidente iraní y sus aliados, los que han jurado "borrar a Israel del mapa", continuando la obra de este espíritu de iniquidad. Y es que siempre ha habido un odio hacia este pueblo escogido ("...mantuvo su furor para siempre" dice el texto). Tal es así, que incluso hay una palabra que lo define "antisemitismo", ningún otro pueblo tiene reconocida internacionalmente una actitud así en su contra.

     Pero como dice el texto, el Señor borrará del todo su memoria debajo del cielo. Los sabios judíos han dicho que es el Mesías quién va a derrotar a Amalec para siempre. Para nosotros los verdaderos seguidores del Mesías Judío -que se ofreció voluntariamente no sólo por su pueblo sino por toda la humanidad-, Yeshúa vencerá a ese inicuo, que se levantará en los tiempos del fin, en el que habitará este espíritu de Amalec (Satanás), -conocido en el Nuevo Testamento, como "anticristo"-, cuando regrese con poder y gloria para establecer su reino, en su segunda venida. Amén.
 
     Para más información seguir este enlace: https://www.youtube.com/watch?v=kANAjzYSX1Q