viernes, 19 de diciembre de 2014

EL ANTICRISTO I



     Numerosas películas han versado sobre este personaje (La profecía, El Bebe de Rose Mary, El Fin de los Días..), contando imaginativas historias de maldad suprema. Todo el mundo ha oído hablar de él, pero pocos han leído lo que la Biblia dice al respecto. También, dentro del mundo cristiano, hay bastante desconocimiento sobre este tema.

     En esta entrada quiero exponer parte de lo que las Escrituras dicen respecto a este asunto. Si no crees en el Dios de la Biblia, al menos espero que este artículo te haga conocer de donde vienen estas películas y novelas, cuál es la verdadera historia. Si eres creyente, me gustaría que este artículo te animara a vivir de una forma cada vez más cercana al Creador, al ver como se acerca la segunda venida del Señor y también a que estuvieras "en guardia", ante este engañador que seducirá y regirá al mundo antes de que se produzca dicho regreso. 

     Más allá de que, en general, la gente piense que este es un tema ajeno a la realidad, los que creemos en la validez y el cumplimiento fiel de las Escrituras, debemos de estar vigilantes ante los sucesos que están aconteciendo, desde que de nuevo, Israel ha sido restaurada en su tierra como anunciaron los profetas de la antigüedad -recientemente el presidente israelí, hizo mención a uno de estos profetas, en el 65 aniversario de la liberación del campo de concentración de Auschwitz, https://www.youtube.com/watch?v=LDEjiwk3EsQ -.Pues éste era un requisito indispensable para poder hablar con propiedad de la cercanía, de las señales, que anuncian el cercano regreso de Yeshúa.

    La traducción de la palabra griega para "anticristo", es "aquel que sustituye o se opone a Cristo". Y, efectivamente así será. pues los judíos, -que antes de creer de forma masiva, deben ser engañados por alguien que los ayudará en la reconstrucción del templo y que les proporcionará "paz y seguridad"- creerán que él es el Mesías que tanto han esperado.

    Durante la edad media, con la corrupción del papado campando a sus anchas, con miles y miles de asesinados por la iglesia romana, - que perseguía de forma implacable a todo el que distribuyera, poseyera o divulgara la Palaba del Creador- los reformadores pensaban sin ningún tipo de dudas, que el papa era el anticristo. Y aunque es cierto que ellos se declaran, de forma blasfema, "vicarios" (sustitutos de Cristo), en mi opinión, las características del papado coinciden más con la figura del falso profeta, que ya estudiamos en otras entradas.

     Yeshúa vino como "el Siervo sufriente" - tal como profetizó 700 años antes, el profeta Isaías en el cap. 53- en su primera venida, para reconciliar al hombre con su Creador. Para derramar su sangre inocente en expiación por el pecado, de todo aquel que cree en El y arrepentido le sigue. Pero la muerte no le pudo retener y prometió que volvería de nuevo, esta vez como Rey, para establecer un reino de paz y justicia y restaurar al mundo tal y como debiera haber sido. entonces se cambiarán las tornas; los opresores, los poderosos, los usureros, fornicarios, inmorales, idólatras... no tendrán parte en ese reino. En cambio, los humildes, los pobres en espíritu, los mansos, los que han sido lavados por su sangre, tendrán amplia cabida en él.

     Como estudiamos en las entradas referentes al tiempo del fin, Mateo 24 y textos paralelos, declaran unas señales que se manifestarán antes de esta segunda venida del Mesías: El fin del dominio de los gentiles sobre Jerusalén, terremotos, terror del mar y las olas, guerras, revueltas, persecuciones, plagas... Vimos como casi todas las señales están cumplidas en nuestros días, menos dos: La reconstrucción del templo de Jerusalén, y la llegada del anticristo, que se sentará en él.

     "Que nadie os engañe en ninguna manera, porque no vendrá sin que primero venga la apostasía y sea revelado el hombre de pecado, el hijo de perdición, el cual se opone y se exalta sobre todo lo que se llama dios o es objeto de culto, de manera que se sienta en el templo de Dios, presentándose como si fuera Dios." 2ª Tesalonicenses 2:3-4

    Esta futura profanación del templo, es denominada por el Maestro: "la abominación desoladora".

     "Por tanto, cuando veáis en el lugar santo la abominación desoladora de que habló el profeta Daniel (el que lee, entienda), entonces los que estén en Judea, huyan a los montes...porque habrá entonces gran tribulación, cual no la ha habido desde el principio del mundo hasta ahora, ni la habrá." (Mateo 24:15-21)

     Jesús nos dirigió hacia lo dicho por el profeta Daniel, quien fue tomado cautivo por el rey babilonio Nabucodonosor, cuando éste conquistó Judá, en el siglo VI a. C.

    Daniel fue un hombre justo, con mucha sabiduría. Consejero importante de diversos reyes, recibió unas predicciones tremendamente exactas, sobre la sucesión de imperios que se sucederían en la tierra, desde sus días hasta la llegada del Mesías.

     Nos ocuparía demasiado tiempo adentrarnos a fondo en todas las profecías del libro de Daniel, por lo que nos vamos a centrar en las características de este "príncipe que ha de venir" en el tiempo del fin, siendo el caso que es en Daniel donde más información encontramos al respecto.

    En el cap. 9, se dice que este príncipe, hará, al fin de los días, un pacto con el pueblo hebreo (seguramente un pacto de "paz y seguridad" como dice 1ª Tesalonicenses 5.3), por siete años, pero a los tres años y medio se volverá ferozmente contra los judíos.

     En el capítulo 7, encontramos las primeras "cualidades" de este hombre, al que se le representa como un cuerno pequeño:

1º. Será natural del pueblo que destruyó Jerusalén en el año 70 de nuestra era. Surgirá de alguno de los países que conformaron el antiguo imperio romano. (Daniel 7:7).

2º. Se presenta como alguien pequeño, sin darse demasiada importancia, mas cuando sube al poder, tres gobernantes caen delante de él. (Vers. 8)

3º. Muy sabio y arrogante, es lo que significa la expresión "ojos como de hombre".

     En los capítulos 8 y 11 del mismo libro, encontramos lo que se llama "profecía de doble cumplimiento", muy común en las Escrituras. En estos textos se profetizó, por un lado, la dominación helena que tuvo Israel desde tiempos de Alejandro Magno, hasta mediados del siglo II a. C., y por otro, se profetiza acerca de este gobernante que accederá al poder, al final de los tiempos.

     Sobre el 168 a.C. un rey griego llamado Antioco Epífanes, gobernaba en Israel. Fue un déspota arrogante, que causó mucho sufrimiento al pueblo judío, pero que, al final fue derrotado por éste, en lo que se conoce como la revuelta de los macabeos.

     Este rey intentó helenizar a la población. Abolió el día de reposo, prohibió el estudio de las Escrituras, introdujo idolatría en el templo, sacrificó animales inmundos, prohibió los sacrificios bíblicos y la circuncisión y persiguió ferozmente a los judíos fieles. Fue un prototipo del anticristo, la persona que más se le habrá parecido, pues repetirá en buena medida su comportamiento. Así pues, en estos capítulos encontramos varias características de este individuo:

     Capítulo 8:

1º. Derrotará a buena parte del ejército hebreo. Se querrá igualar a Dios y quitará el sacrificio del futuro templo restaurado (v. 10-14).

2º. Será muy insolente y conspirador. (v 23)

3º. Tendrá un poder no humano, sobrenatural. (v24)

4º La astucia y el engaño irán siempre de su mano. Se levantará contra el Señor, en la segunda venida de Éste, y entonces llegará su fin (v25) https://www.youtube.com/watch?v=0Wlzroutvvs&t=2s

Continúa parte II


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